Drew Barrymore ha decido retirar todos
los tatuajes de su cuerpo para así poder obedecer los preceptos de su nueva
religión, el judaísmo. Lo decidió luego de casarse con Will Kopelman, consultor
de arte. La actriz tiene seis tatuajes, entre los que destacan una mariposa en
el vientre y flores en la cadera.
Esto lo hace porque está planeando ser enterrada al morir en un cementerio judío, y una de las exigencias es no tener tatuajes. Barrymore utilizará cirugía láser para eliminar los tatuajes: un procedimiento muy doloroso. Esta noticia ha vuelto a plantear las interrogantes sobre la religión y los tatuajes.
Drew, quien tuvo una adolescencia desenfrenada y salvaje, ahora con 37 años, se casó el junio pasado con Kopelman; siguiendo los rituales tradicionales judías y está planeando criar a su pequeña hija de 4 meses, Olive, en dicha fe, la cual prohíbe tatuarse.
“Sigo una fe hermosa y estoy muy contenta
de ser parte de ella”, manifestó Barrymore. La transformación y el cambio de
personalidad de Drew se ha notado mucho en su papel como madre, ya que ella ya
no quiere utilizar la ropa atrevida que utilizaba anteriormente. Quiere ser
conservadora, por lo que se podría afirmar que está madurando como persona,
esposa y madre.
Dios omnipotente, derrama una gigantesca
bendición a todo aquel que comparta y reenvíe este artículo a todos sus amigos…
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