Terrie Hall es una de las personas que aparecen en la campaña publicitaria de Consejos de los ex fumadores.

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Aunque murió a los 53 del cáncer que tan valientemente combatió los últimos 13 años de su corta vida, Terrie fue una inspiración para muchos; siempre agradecia por la oportunidad de contar su historia con la esperanza de salvar al decir todo lo que ella que había soportado. Su fallecimiento fue una pérdida para todos, y un recordatorio de prestar atención a su advertencia sobre los peligros de fumar.

Terrie era muy joven cuando empezó a fumar en la escuela secundaria: "Pensé que era la cosa más interesante que hacer", dijo. El fumar le causó cáncer en la boca y en la garganta. La cirugía y la radiación del tratamiento para eliminar el cáncer le dejaron cicatrices en su cara y cuello, además de que ya no pudo hablar bien. Pero todo lo que le pasó la hizo más valiente y una inspiración.

En una sociedad donde las mujeres son juzgadas por como se ven, Terrie no ocultaba sus cicatrices en la cara causadas por el tabaquismo. Las cicatrices donde le habían cortado parte de su mandíbula y en la garganta donde le habían quitado la laringe, todo eso sólo la hizo hablar, sobre todo a los jóvenes en las escuelas. Con su voz ronca, ella quería reavivar la conciencia del pueblo estadounidense al sufrimiento continuo causado por el tabaquismo.

Ella quería que los jóvenes conocieran la verdad sobre el tabaco. Terrie dijo: "Me gustaría que alguien me hubiese mostrado esto cuando empecé a fumar en la escuela”. Terrie se hizo famosa en todo el mundo por su participación en la campaña de Consejos de los ex fumadores. Donde ella muestra cómo se prepara cada día, se pone su peluca, su dentadura, su dispositivo de manos libres en el agujero en la garganta; es difícil de ver.