Las enfermedades de transmisión sexual
son infecciones muy peligrosas y se propagan muy rápidamente. En el caso de que
sea sexualmente activo (Si tiene relaciones, es una persona y no es monógamo)
corre el riesgo de exponerse a estas enfermedades: a mayor número de parejas,
mayor es el riesgo que corre. Las precauciones que deben tomarse para
protegerse de estas enfermedades incluyen el tener que orinar y lavar su área
genital después de cada coito; el uso de condones y espermicidas vaginales. Es
muy importante que visite a un especialista con frecuencia para realizarse las
pruebas de la sífilis y la gonorrea, tanto tú como tus parejas sexuales, en el
caso de que tenga más de una.
Si sospechas que has sido infectado por
una de estas enfermedades: coméntelo con su pareja (s) para hacer una visita a su doctor o asistir a
una clínica especializada lo antes posible. Las enfermedades de transmisión
sexual se pueden curar haciendo uso de buen tratamiento farmacológico. Nunca
trate este tipo de enfermedades usted mismo. Sobre todo, no deje que la
vergüenza le impida recibir la atención médica que necesita.
La
sífilis tiene varias etapas
Aquellas personas que han sido infectadas
con sífilis, quizás no presenten ningún tipo síntoma durante un largo período
de tiempo. Sin embargo, si esta enfermedad se deja sin tratar, los enfermos
pueden sufrir complicaciones muy dañinas durante la última etapa de esta
enfermedad. En el primer periodo o etapa de la sífilis se puede observar la
presencia de pequeñas y dolorosas úlceras. El problema está en que estas
lesiones suelen curarse sin necesidad de tratamiento; y esto a su vez facilita
el tratamiento de la sífilis, ya que la mayoría de las personas desconocen que
están infectados por sífilis.
Durante la segunda etapa empiezan a
aparecer erupciones por todo el cuerpo, que suelen ir acompañadas con otro tipo
de síntomas como ganglios inflamados, dolores de cabeza continuos, fiebre,
dolores de garganta, fatiga y dolores musculares. Una gran similitud con los
síntomas de la primera etapa, los síntomas de la segunda etapa pueden estar encubierto
y podrán sanar por sí solos, pero si no se trata esta condición, la infección
progresa a la conocida como fase latente de la sífilis; y esta llevará con el
tiempo a la fase tardía de la enfermedad. La fase latente puede tener una larga
duración, de incluso años sin que el paciente note ningún tipo de síntomas,
pero si ésta no es tratada, entonces la enfermedad evolucionará a su fase
terciaria: la más peligrosa y perjudicial para la salud del paciente. Durante
la fase terciaria de la sífilis, esta ataca a todos los órganos internos de
nuestro cuerpo, incluyendo el sistema nervioso central, el cerebro, los huesos,
las articulaciones y el hígado. Aquellas personas que sufran de sífilis en su
fase terciaria pueden llegar a experimentar graves problemas psicológicos,
entumecimiento de los miembros, parálisis, ceguera y hasta demencia. Este
cuadro de salud sufrido por un largo periodo de tiempo, que podrían ser años, puede
llevar finalmente a la muerte del paciente. Por este motivo es siempre
aconsejable ponerse en contacto con su doctor o centro de salud en el momento
que sienta algunos de estos síntomas.
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