"...Más los que esperan en EL SEÑOR tendrán nuevas fuerzas; levantarán las alas como águilas, correrán, y no se cansarán, caminarán, y no se fatigarán...". Isaías 40:31
NO ES HORA DE DARTE POR VENCIDO. No es el momento de que te olvides de todo lo puro y bello que Dios ha puesto en tu corazón.
Nuevo día, nueva semana, nuevos retos, nuevas situaciones que enfrentar. Pero en todo: ya eres vencedor. Tu parte es creer y caminar firmemente. No te arrojes sin sentido a los peligros innecesarios, más bien la fuerza que Dios te da, no es para alardear de "unción" o poder, sino para enfrentar situaciones con valentía; con la seguridad de que ya eres vencedor y, por lo tanto, te comportas como vencedor, porque sabes que ―pase lo que pase― vas a vencer; y después de vencer, das gracias a Dios y sigues caminando.
Mañana vendrán cosas diferentes, así que... renuévate como el águila, con el poder de Cristo Jesús.
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