CONOCE ESTAS 5 IMPACTANTES HISTORIAS
Las autoridades sanitarias advierten a los jóvenes asiduos
al gimnasio sobre las nefastas consecuencias de inyectarse aceite comestible
para aumentar la masa muscular o para uso cosmético.
Según el diario cubano Granma en su artículo "Los 'músculos'
de la responsabilidad", las consecuencias de estas prácticas pueden ser
muy peligrosas: infecciones, intervenciones quirúrgicas, e incluso, la muerte".
En Cuba, por ejemplo, la ausencia en el mercado de la costosa y peligrosa inyección llamada Synthol, un producto compuesto por ácidos graso, lidocaína y el alcohol benzoico, es empleada principalmente por los deportistas para darle brillo a la piel antes de las competencias de fisiculturismo. Sin embargo, algunos de estos jóvenes en su lugar utilizan sustancias igual de nefastas como aceite de soja, girasol, oliva o de maní. Pero la relación entre el Synthol y los aceites comestibles no está solo en su composición grasa, sino en su efecto: causan una inflamación que no debe confundirse con el aumento de la masa muscular", señaló el artículo.
El diario además advirtió que una simple inyección puede
ocasionar una mala reacción a la sustancia introducida, ocasionando incluso la
muerte.
Muchos deportistas ponen en peligro sus vidas después de
inyectarse aceite para aumentar sus bíceps; mientras otros arriesgan sus vidas por
utilizar inyecciones de aceites para uso cosmético tratando de mejorar su
aspecto. Obviando que no hay ninguna garantía al utilizar estas letales
inyecciones.
Se han recibido informes de que las personas se inyectan vaselina,
aceite de ricino, aceite mineral, fluidos de transmisión para automóviles,
aceite de avión, selladores de silicona… en el rostro, caderas, muslos, pechos
y nalgas.
Por otro lado, un gran número de personas que recibieron inyecciones
por parte de los proveedores de servicios médicos sin licencia han sido hospitalizadas
para recibir costosos tratamientos quirúrgicos y antibióticos para salvar sus
vidas. No obstante, a pesar de todos los peligros que conllevan el inyectarse estos
productos químicos en el cuerpo, se han recibido informes de que entre las
mujeres latinas ha aumentado el número de tratamientos por parte de los
proveedores de servicios médicos sin licencia.
A continuación le presentamos algunas historias de personas
ingenuas que confiaron en gente sin escrúpulos, y quienes marcaron sus vidas
para siempre. Algunas de ellas, ya no están entre nosotros. Nuestro fin no es
más que el de alertar a los incautos para que no terminen sus días como las imágenes
que verá a continuación.