Mi corazón casi se paraliza
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Bueno, mamá, te juro que
si te lo iba a decir, pero se me había olvidado… ¿ok? El profe de natación me
regalo este collarcito, pero me dijo que no le dijera a nadie, pero me sentía
mal no decirte a ti mamá… mira, es un collarcito de conchitas de mar, que él se
encontró en Mazatlán trabajando como salvavidas, un día que salvó a una chica
de ahogarse… (y ella quiso seguir hablando)…
— Déjame ver el collar….
Ah, que bonito esta… ¿y cuándo te lo dio?— Le pregunté aguantando la respiración.
— ¡Oh!… Mmm… el lunes
pasado…sí, el lunes… (Hacía 4 días), me dijo medio temerosa.
— Y… ¿le dio collares a
otros niños o, a otras niñas? O… ¿solo a ti?— Volví a aguantar la respiración.
— Pues, creo que nomás a
mí, porque… me dijo que no le dijera a nadie, porque, otros iban a querer un
collar y….creo que a mí…
— ¿Dónde estaban cuando te
lo dio?— Esta conversación estaba destrozando los nervios.
— ¡Ah! Él me llevó a la
oficinita de los instructores…
Mi
corazón casi se paraliza del susto.