2024-05-07

Cuando no nos alimentamos bien, estamos bajo mucho estrés o estamos cargados de energía negativa nuestros riñones sufren las consecuencias. Todo empeora si tenemos antecedentes familiares con enfermedades renales.

Aprende 9 consejos para ayudar a los riñones a funcionar mejor con remedios caseros y algunos simples consejos.

Consejos para cuidar los riñones

 

  1. Bebe agua

Debe hidratarse siempre, sobre todo, si siente dolor leve. Tome mucho líquido (infusiones, zumos). Pero si su dolor es demasiado fuerte y persistente, y dura más de 2 o 3 días, debe consultar con su médico, pues la infección se puede propagar causándole complicaciones muy difíciles de tratar.

 

Por tanto, tomar agua durante todo el día es el tratamiento más sencillo, económico y natural que ayudará a sus riñones a funcionar mejor, evitando la formación de cálculos, inflamaciones e infecciones.

Sin embargo, debes tener en cuenta la calidad del agua, así como debemos asegurarnos de que sea baja en sodio, pues de lo contrario, podría ser perjudicial.

Así es que, mantenga sus riñones sanos al tomar agua sabiamente. Esto quiere decir que debe tomar la cantidad correcta de agua. No necesariamente tienen que ser los populares 8 vasos al día. La ingesta de agua difiere en cada persona, según sus necesidades básicas (edad, clima, actividad diaria, embarazo, lactancia, enfermedades).

Como mínimo debes tomar, al menos, un litro y medio de agua, fuera de las comidas y repartidos en varios vasos antes o después de las comidas.

 

  1. Controla la sal

La sal no es del todo mala. De hecho, la necesitamos, pero en pequeñas cantidades. Las mejores sales son la sal marina y la sal del Himalaya.

Sin embargo, el problema radica en que la consumimos en exceso.

Lo peor es que utilizamos la sal común. Es decir, la sal de mesa, la cual sólo tiene cloruro de sodio y no contiene el equilibrio mineral ni oligoelementos que tanto nuestro organismo necesita.

 

¿Qué pasa cuando consumimos demasiada sal?

Si consumes sal en exceso, tus riñones estarán obligados a retener agua para poder eliminarla. Esto provoca un desequilibrio de líquidos en tu organismo, por lo que tu presión arterial se elevará peligrosamente. A largo plazo, el consumo excesivo de sal perjudica las nefronas.

  1. Debes reducir los lácteos

Por si no lo sabías, la leche y sus derivados aumentan la eliminación de calcio por la orina. Esto favorece enormemente el desarrollo de cálculos renales. El problema se hace más grave si tu consumo de agua es poco o si tienes predisposición genética.

Si incluyes los lácteos en tu dieta como una medida para obtener más calcio, debes tener presente que el mineral que se encuentra en estos alimentos, no se asimilan de forma correcta. A largo plazo terminan dañando tus riñones.

  1. Evita en lo posible el azúcar

La importancia que tienen los pulmones y tus riñones es invaluable. Estos mantienen en equilibrio el pH de la sangre. Sin embargo, cuando añades azúcar a tus platos y bebidas favoritas, aumentas la acidez de tu organismo. Por tanto, sobrecargas estos órganos imprescindibles.

Mejor busca alternativas más saludables como la panela o el azúcar de coco. La stevia podría ayudar también.

  1. Necesitas sudar

El ejercicio, generalmente, es bueno. Pero sin exagerar, ya que puedes elevar tus niveles de creatinina. Esto sucede cuando el metabolismo muscular la produce al utilizar excesivamente los grupos musculares a través de una actividad extenuante.

En fin, cada vez que sudas alivias la sobrecarga de trabajo que sufren los riñones, ya que propiciamos otra vía de eliminación de líquidos y toxinas de nuestro cuerpo. En este caso, aumentar la sudoración puede ser una terapia maravillosa para mejorar la función de los riñones.

¿Cómo puedes aumentar la sudoración de forma segura?

-A través del ejercicio físico de intensidad media o alta, pero en intervalos.

-Sauna.

- Por medio de la ingesta de especias picantes como la pimienta de cayena o el jengibre.

  1. Desintoxicaciones

Desintoxicar tu cuerpo una o dos veces al año, sobre todo, cuando tenemos cambio de estación, es muy provechoso para tu salud. La limpieza o cura depurativa facilita la eliminación de toxinas liberando y mejorando la función hepática y la de los riñones.

Más: La verdadera historia detrás de Lion

Más: Si tienes una de estas enfermedades, no consumas jengibre 

Más: La ciencia dice que los maridos altos y las esposas bajitas tienen mejores matrimonios

Más: La clave de la perseverancia

Más: Los niños deben dormir a oscuras, según estudios

 

¿Cómo limpiar los riñones de manera natural?

 

Por medio de remedios caseros como

-Zumos verdes de apio, pera  y manzana

-Caldos de ajo y cebolla

-Infusiones de diente de león, cola de caballo y bardana

-Consumiendo pimientos rojos, ya que son bajos en potasio y agregan color y sabor a sus platos. La vitamina C, B6, A y el ácido fólico y las fibras que contiene, así como antioxidantes ofrecen además cierta protección contra algunos tipos de cánceres.

-Asimismo, las fresas son altas en antioxidantes, manganeso, fibras y vitamina C. Sus propiedades antiinflamatorias y anticancerígenas son buenas para tus riñones.

  1. Evita el consumo de alcohol

Tomar mucho alcohol es perjudicial para tu salud. Tiene consecuencias muy negativas y serias al dañar la funcionalidad de tus riñones. Recuerda que la principal función de tus riñones es la de filtrar las sustancias nocivas de tu sangre. El alcohol es una sustancia nociva. Su consumo deshidrata e impacta negativamente a tus riñones.

  1. Controla tus emociones

La emociones negativas pueden afectar, no solo los riñones, sino todo nuestro cuerpo. Emociones como la ira o la tristeza daña también al hígado y a tus pulmones. En el caso de los riñones, la emoción más dañina es el miedo.

Un terapeuta profesional ayudarte a analizar tu personalidad y recomendarte los pasos a seguir para afrontar el miedo en tu vida.

  1. Calor local

Siempre ten a mano una bolsa que puedas utilizar para aplicarte calor con agua caliente. Es importante evitar el frío o las corrientes de aire muy frías en tu espalda media, pues podría agravar cualquier trastorno renal.