Eres una mujer enamorada, ese hombre está en la vuelta de la esquina, se conocen pero no sabes cómo decírselo. Quizás es un amigo cercano, o el amigo de alguien conocido.
O simplemente, lo conoces a medias pero estás completamente enamorada de él. Seguramente aves que tú le gustas pero por alguna razón (quizás por respeto y conservar amistades), él tampoco da el paso que esperas. Miles de veces intentas acercarte.
Tenerlo de cerca y decirle lo que siente por él. Ser sincera y abrirte a un mundo de posibilidades junto a esa persona. Junto a ese hombre que te eleva los sentidos.
Hacerlo no es fácil. Es un acto que conlleva valentía y determinación. Puede que sea una mujer entera y seria en tu trabajo, que tomas decisiones correctas en tu hogar con tu familia. Pero el amor hace débiles a las personas, por miedo al rechazo y es normal que te sientas cohibida.
Entonces, poco a poco puedes irte acercando a él para que se conozcan. Sepan quienes son cada cual, que cosas les gusta y si tienen esos gustos en común. Es un buen paso a seguir antes de declararle tus sentimientos. Antes de decirle exactamente de qué está hecho tu corazón cuando lo ves y lo tienes cerca.
Pero el momento se acerca. Estás a punto de ganar su confianza o quizás, ya la tengas ganada y quieres decirle en palabras, lo que vez de él. Lo que quieres para que te acepte como una compañera de vida.
Pues, las frases de amor ayudan mucho. No se trata de un acto cursi o de mentira. Se trata de usar el poder de las palabras para conquistarlo. Observa esta frase para conquistar a un hombre:
<< Veo en tus ojos una luz que me lleva a perderme en tu ternura más dulce, veo en ti a ese amor que anhelo >>
La misma puede describir a la perfección lo que sientes por él. Imagina que se lo dices. Práctica en un espejo antes de enfrentarlo. Escríbela en una tarjeta o en un block de notas en tu teléfono móvil. Mírala y entiende cómo es de hermosa la frase. Cuando lo tengas de frente, dile que debes hablarle de algo importante. Espera que él preste toda tu atención en ti. Cítalo en un lugar donde no sospeche de qué trata y que acepte ir sin pensar mucho en lo que querrás decirle. Quizás en la mesa de un café donde puedan conversar amenamente, puede funcionar.
Míralo a los ojos y recítale la frase. No tiene que ser exactamente como lo estipula el poema. Puedes improvisar adaptando tus sentimientos a ella. Como por ejemplo:
<< Desde hace un tiempo, cada vez que te veo, percibo una luz que me hace perderme en tu lado bueno. Cada vez que te veo, que puedo mirarte a los ojos como en este momento, me doy cuenta de que eres ese amor que yo deseo en la vida >>
Si él está dispuesto a aceptarte, caerá rendido ante tu declaración, porque hablas con el alma y corazón. Hablas con sinceridad y no le pides de frente: Sé mi pareja. Si no que le confiesas tu más íntimo anhelo como mujer que se merece ser amada. Quizás arriesgues mucho. Puedes decirle que no se sienta cohibido con tus palabras. Que si no quiere aceptarte, la amistad puede continuar. Pero necesitabas decirlo. Necesitabas ser sincera contigo misma y con él. Ya verás como ese nuevo amor entra a tu vida y la cambia completamente.
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Errores sexuales del hombre en el matrimonio.