Comer fuera con niños pequeños puede ser toda una hazaña. Muchos padres no saben qué hacer con sus hijos mientras llega la comida. Si los niños son muy traviesos, ruegas para que no rompan nada, sin contar las inoportunas idas al baño por causa de los refrescos. Afortunadamente, a estas dos familias italianas salir con niños pequeños les va muy bien. De hecho, hasta un premio han recibido, pues sus hijos se comportan de maravillas en la mesa.
La historia
Dos parejas salieron a comer a un restaurante en Padova, Italia, con sus hijos, 6 en total. Pero contrario a la imagen que seguro ya has de tener en tu cabeza, de niños corriendo por los pasillos atormentando a los meseros o niños intranquilos haciendo desastres en el baño del restaurante, estos niños se comportaron demasiado bien, según informa el diario Matino Padova.
Antonio Ferrari, dueño del restaurante, quedó asombrado por el buen comportamiento de los niños en la mesa, quien confiesa que desde que su restaurante comenzó a abrir los domingos para ofrecer almuerzos, el problema de los niños que se portan mal les tenía desilusionados. “Los niños corren en todas direcciones, se arrojan al piso y los meseros deben esquivarlos. Es muy difícil trabajar en estas condiciones”, dice Ferrari.
No obstante, los pequeños de estas parejas se mostraban tranquilos, respetuosos y sus padres nunca tuvieron que llamarles la atención.
Ferrari dijo estar consciente de que es difícil ser padres. Según él, “no siempre se puede decir que no a los niños y criar a los hijos con prohibiciones, no es bueno; pero cuando estás frente a otros, deben mostrar respeto”. Así que el bueno de Ferrari ofrece el 5% de descuento a todos aquellos que pueden ‘aplacar’ a sus hijos. “Repito, es una recompensa por ser buenos padres”, agregó.
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La pareja recibió en total un descuento de 13 euros. En el recibo figura el gasto como “Descuento por niño educado”.
Esto es vergonzoso
Por si no lo sabías, hay restaurantes que prohíben la entrada de niños. Está bien que se premie a un niño por portarse bien, pero incentivar a los padres para que eduquen a sus hijos… Me recuerda las galletitas que les dan a las mascotas para premiarlas cuando obedecen. Padres, ¡qué bajo hemos caído!
Existe una falsa creencia de que “los niños son niños” y por eso hay que dejarlos hacer cuanto quieren. Aunque nos alegramos de que a estos padres les hicieron un reconocimiento por mantener sus hijos bajo control, nos entristece mucho que un alto porcentaje restante de padres no pueden educar a sus hijos. Si ustedes, padres, no pueden, ¿quién lo hará?
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La Biblia es clara, “Instruye al niño en su camino, y aun cuando fuere viejo no se apartará de él”, Proverbios 22:6
Este versículo es muy mal interpretado por algunos cristianos, quienes creen que es que deben instruir al niño en los caminos del Señor. Si bien es lo que debería hacer un buen cristiano, aquí no se refiere a “los caminos del Señor”, sino a los caminos del niño.
Es decir, si usted, padre, no es capaz de corregir a su hijo desde una edad muy temprana, jamás podrá hacerlo.
Otro gran error de la gran mayoría de los padres es creer que los hijos después de crecer, ya no se equivocarán más. Todo lo contrario. Su deber como padre es corregir incesantemente, hasta que usted muera. Su hijo puede tener 60 años y si comete una falta, usted como padre debe corregirlo.
La corrección no es solo trabajo de la escuela. Sus hijos deben aprender modales en casa. Entienda que cada uno tiene un papel que desempeñar. Usted es el padre o la madre, sus hijos son ‘sus hijos’. Es hora de que lo respeten. Pero esto es difícil, en un mundo donde “caes bien” solo si escuchan lo que quieren.
En cuanto a las prohibiciones, claro que debes prohibir. Un niño no puede andar por ahí por su cuenta haciendo lo que desea. Necesita reglas, límites que respetar para que vivamos todos en paz.
Si usted no corrige, no quiere a su hijo.
