2016-12-21
A los seres humanos nos cuesta aceptar los planes de Dios. La respuesta en sencilla, estamos en desacuerdo y reprendemos toda mala situación porque no queremos aceptar lo malo, solo lo bueno.

No somos adivinos, el Señor condena la adivinación. Pero al no poder adivinar nuestro futuro nos sentimos inquietos, impotentes y desesperados. Sin embargo, Dios todo lo sabe. Sus planes son mejores que los tuyos. El plan de Dios es mucho mejor.

El futbolista brasileño Alan Ruschel, uno de los sobrevivientes del terrible accidente aéreo del Chapecoense, expresó su gratitud por el cariño, la fuerza, las oraciones y todos los buenos pensamientos que recibió después de la tragedia.

Junto a una fotografía con su familia, el futbolista se unió al dolor que embarga a las familias de los fallecidos en el accidente. "¡Padre, te pido que ampares a sus familiares y les des fortaleza! Dios, gracias por la misericordia en este milagro. El Señor es maravilloso. ¡Gracias!", escribió Ruschel en un mensaje que se viralizó en las redes sociales.

Tanto Ruschel como el periodista Rafael Henzel se encuentran en buen estado de salud. Su estado psicológico y clínico es "sorprendente", según declararon los médicos que les atendieron al ser ingresados en el Hospital Unimed de la ciudad de Chapecó en Santa Catarina.


La doctora Carolina Ponzi, dijo:"Ambos están bien, si consideramos la gravedad del accidente y el gran número de lesiones".

El equipo médico informó que los pacientes están "optimistas y contentos" de poder estar rodeados de sus familiares en el hospital, luego de permanecer ingresados durante semana y media en un hospital de Medellín, donde recibieron el apoyo de muchos colombianos.

Tanto Henzel como Ruschel se sienten afortunados de haber sobrevivido a un accidente aéreo desastroso, en el que perdieron la vida 71 de los 77 pasajeros que viajaban en el avión.

Ruschel está convencido de que Dios tuvo el control, cuenta: “Me acuerdo que estaba sentado al fondo, en una de las últimas tres filas del avión… Recuerdo que mi amigo Jakson Follman me llama, y me dice: ‘Ven, siéntate conmigo’. Me senté a su lado porque era él, yo lo conozco desde el 2007. Entonces dejé de mi asiento y me fui con él. En ese momento, me estaba salvando la vida”, confiesa Ruschel evidentemente conmovido al recordar el trágico suceso. Jakson Follman también es uno de los sobrevivientes de esta tragedia.

Y tú, ¿eres capaz de aceptar la voluntad de Dios, aunque a veces llegue algún siniestro a tu vida? ¿Das gracias a Dios en todo tiempo?