¿Qué es realmente el amor incondicional de una madre hacia un hijo? ¿A qué se refiere la gente al utilizar esta afirmación?
En algún lugar más allá del arcoíris alguien inició un malsano rumor que llegó a los oídos de las madres en todo el mundo, llevándolas a pensar que, si no tenían siempre y todo el tiempo, todos los días, sentimientos afectuosos, calurosos y super apasionados hacia sus hijos, entonces el amor para con sus hijos no era un amor incondicional.
Las madres en todo el mundo empezaron, y aún hoy en día continúan sintiéndose culpables cuando experimentan algún sentimiento no tan agradable hacia sus hijos. Para contrarrestar esto entonces, comenzaron a malcriarlos y sobre consentirlos tratando de hacerlos sentirse felices a cualquier costo, permitiendo así que sus sentimientos de culpa gobernaran sus hábitos de crianza y la toma de decisiones en cuanto a esto.
El amar a un hijo incondicionalmente va más allá de hacerlos sentirse felices. El amor es mucho más que solo dar abrazos y regalos. El amor es una decisión, una actitud, un estilo de vida, algo que va a largo plazo y alcanza muy lejos.
Cómo criar hijos seguros de sí mismos: consejos para lograrlo
Yo amo a mis hijos porque son mis hijos. Nada de lo que hagan podrá cambiar eso. ¿Pero significa esto entonces que yo debo dejarlos hacer lo que ellos quieran aun cuando esto vaya a favor de su propia destrucción? ¡Claro que no!
“La vara y la corrección dan sabiduría; más el muchacho consentido avergonzará a su madre” nos dice proverbios 29:15
El amor incondicional no es dictado por los sentimientos
Los sentimientos pueden ser inútiles, falsos e improductivos. Los sentimientos de una mujer anoréxica pueden decirle que ella está gorda a pesar de que su peso sea 85 lbs, o los de alguien que está pasando por la ruptura de una relación puede llegar a pensar que no podrá volver a amar nunca más.
Mejor que sumen y no que resten
Si te encuentras exhausto puedes llegar a sentir resentimiento de tu hijo pues, para ser francos, no estás generando a plena capacidad. Si tu adolescente es rebelde y está empujando a toda la familia hacia un precipicio junto con el, tu puedes llegar a sentir ira, confusión e incluso intensos deseos de echarlo fuera. ¿Significa entonces que no amas a tu hijo incondicionalmente? Claro que no. Significa que somos humanos y que nuestros sentimientos reaccionan a lo que nos rodea.
El amor incondicional protege
La disciplina y los límites no son agradables, pero tienen un maravilloso resultado a largo plazo. Por esto, si de veras queremos proteger en amor a nuestros hijos, debemos aplicar ambos en todo tiempo.