La fascitis plantar, mejor conocida como el "talón del corredor", es una afección gravemente dolorosa que afecta el talón y el arco del pie, y generalmente ocurre después de caminar o estar de pie por mucho tiempo, pero también ocurre con frecuencia en personas con sobrepeso.
Causas de fascitis plantar.
El dolor agudo y punzante asociado con este trastorno proviene de una inflamación de la fascia plantar, un tejido conectivo grueso que va desde el hueso del talón hasta los dedos del pie.
El uso prolongado y el estiramiento excesivo causados por la realización de actividades que ejercen mucha presión sobre el talón pueden provocar inflamación en esta área.
Factores de riesgo.
Los principales factores de riesgo incluyen tener arcos altos, pies planos, un tendón de Aquiles apretado, zapatos con suela blanda y soporte de arco pobre, aumento de peso extremo y carrera de larga distancia.
Pero incluso si tiene algunos de estos factores de riesgo, puede prevenir la fascitis plantar al mejorar la flexibilidad de los músculos de la pantorrilla y el tendón de Aquiles.
Tratamiento de la fascitis plantar.
Aunque el tratamiento convencional de la fascitis plantar puede ser largo y difícil, hay muchas maneras de acelerar el proceso de curación del tejido dañado.
Antes que nada, considere tomarse unos días para descansar y moverse lo menos posible. En segundo lugar, compre zapatos nuevos de calidad con un buen soporte para el arco que equilibrará la presión ejercida sobre sus pies.
Para aliviar el dolor, puede probar algunos medicamentos antiinflamatorios u optar por remedios naturales caseros, como aplicar compresas de hielo, sal y miel o envolturas de papa en el área dolorida.
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Tratamiento con pelota de tenis para fascitis plantar.
Y luego está el método de terapia más simple pero bastante sorprendente del que probablemente aún no hayas oído hablar y que involucra solo una pelota de tenis
Para realizarlo, simplemente siéntate en una silla, coloca el arco de tu pie sobre una pelota de tenis en el suelo y ruédala hacia adelante y hacia atrás.
Después de recuperar parte de la flexibilidad y la mayoría del dolor desaparece, puede cambiar a una posición de pie.
Este ejercicio está destinado a relajar el tejido de la fascia plantar y aliviar el dolor y la incomodidad, y ha demostrado ser extremadamente eficaz en la mayoría de los casos de fascitis plantar.
Después de que tu pie cicatrice, asegúrate de reducir las actividades físicas que han causado esta afección en primer lugar y protege tus pies de lesiones.
Pierde algo de peso, trabaja para aumentar la fuerza y flexibilidad de tus pies, compra los zapatos adecuados o cambia tu rutina de ejercicios.
Los problemas relacionados con los pies son dolorosos y pueden afectar fácilmente su salud y estado físico general, por lo que, si realmente desea sentirse y verse lo mejor posible, nunca pase por alto la importancia de mantener sus pies sanos.