Padre amado, vengo en este momento ante ti. Postro mis rodillas ante tu Hijo Jesús, y abro mi corazón a la gracia plena del Espíritu Santo reconociendo:
- Que debo primeramente, enfocar mi vida a todas las cosas que pertenezcan a tu reino.
- Que debo perdonar a otros y perdonarme a mí mismo: para que yo sea también perdonado.
- Que debo creerle firmemente a tu palabra escrita e inspirada a hombres santos y a profetas.
Entrego a ti todo mi ser porque tú conoces mis luchas, tú conoces todas las cosas que yo y mi familia hemos atravesado, y tú sabes que nuestro deseo es vivir en paz y ser totalmente libres de toda cadena financiera que nos ate: de toda carga emocional, de toda influencia maligna. También ayúdanos a olvidar el pasado para poder vivir con alegría en este año.
Señor, abre mis ojos para poder conocerte más, entender más de tu palabra y ponerla por obra. Derrama sobre mí la sabiduría que pusiste en Salomón, la valentía del rey David, la elocuencia del Apóstol Pablo, pero sobre todo: lléname de tu paz y serenidad, porque cansados y cargados hemos estado y hoy venimos a ti para que nos hagas descansar.
Quita por el poder de tu sangre toda vergüenza, todo mal recuerdo, toda raíz de amargura que nos atormente el alma, y dale a nuestra mente claridad para en 2022 entender, creer y experimentar tu divino amor.
Señor, te pido que las puertas de los cielos se abran sobre tu humilde hijo y sobre mi familia; y que este 2022 tus ángeles rodeen mi hogar y nos defiendan, y que vengan maravillosas oportunidades y milagrosas bendiciones como nunca antes lo hemos visto ni lo hemos vivido.
Con todo mi corazón Padre Celestial, te adoro…
Escrito por Hermes Alberto Carvajal
Creador y escritor en la página de Facebook Dios Es Bueno!
Recuérdalo, todos los días, una palabra de fortaleza para ti.