Hay muchas razones asombrosas para alabar a Dios durante una crisis. De hecho, tenemos que alabar a Dios en todo tiempo, tal y como nos lo indica el Salmo 34:1 “Bendeciré a Jehová en todo tiempo; Su alabanza estará de continuo en mi boca”.
Así es que, no importa el lugar o el momento difícil que estés atravesando, ¡alaba a tu Señor!
Razones increíbles para alabar a Dios en tiempos de crisis
Razón #1: Dios nos perdona, ¡alábalo!
Una de las mejores razones para alabar a Dios es cuando sabes que has cometido un error o estás en medio de algún tipo de situación que consideras imposible de superar. Esta puede ser una gran oportunidad para que le expreses a tu creador cómo te sientes. Él ya lo sabe, pero debes dejar que Él te muestre Su gloria a través de la alabanza.
Razón #2: Al alabar, cedemos el control
Por lo regular, sentimos que nos ahogamos en un mar profundo cuando lo que hemos anotado en nuestra lista de metas, sueños y deseos no se cumple. Es bueno que te detengas y, por un momento, no hagas nada, solo alaba. Esto es porque muchas veces queremos mostrarle al Señor cómo debe hacer las cosas. ¡Cuán grave error! Él sabe perfectamente qué necesitamos, cómo lo necesitamos y cuándo nos lo puede dar.
Razón #3: Dios es nuestro Padre
Otra de las increíbles razones para alabar a Dios es cuando sabes que has fallado y no sabes por qué. Muchas veces puede ser difícil averiguar qué fue lo que falló y cómo arreglarlo. Pero ¿sabías que Dios puede hacer que erremos a propósito? A veces Dios tiene que salvarnos de nosotros mismos para que podamos alcanzar la bendición.
Por lo tanto, como un padre amoroso, nos exhorta o corrige. Es precisamente en este momento en el que debes alabar a Dios, pues la alabanza modera nuestro ego, por lo que reconocemos nuestros errores, debilidades y la necesidad inmensa de depender de Él.
Razón #4: La alabanza enaltece a nuestro Dios
Enaltecer significa resaltar los atributos, cualidades o méritos de Dios. La alabanza agrada a Dios, pero nos ayuda también a domar nuestro orgullo, como lo hemos dicho en la razón
#3, cuando alabamos, vamos ante el trono de la gracia humillados, y, Dios enaltece al humilde: “Porque todo el que se ensalce, será humillado; y el que se humille será ensalzado”. Lucas 14:11
“El sacrificio que te agrada es un espíritu quebrantado; tú, oh Dios, no desprecias al corazón quebrantado y arrepentido”. Salmos 51:17
Razón #5: Alabar nos permite ver la perspectiva de Dios
Cuando nos humillamos ante Él y alabamos, nuestra sensación de seguridad se va fortaleciendo y aumenta nuestra fe. Esto nos permite ver las cosas como Dios las ve, desde su perspectiva. ¿Imaginas lo que es tener la mente de Cristo en medio de una crisis?
En resumen, cuando alabamos la tensión o presión que estamos sintiendo en tiempos de crisis, se va. Además, cuando alabamos la bondad de nuestro Señor Jesucristo se manifiesta y encontramos nuevas fuerzas. ¿Sabes por qué? Porque Él habita en la alabanza de su pueblo.